Fue a finales del siglo XIX y a principios del XX cuando el gobierno de Porfirio Díaz inició por todo México una promoción de las tradiciones y culturas de Francia; fue así como nació un platillo conocido como ‘leño relleno’, la herencia francesa en la gastronomía en Guanajuato.
Es sin duda uno de los platillos callejeros más tradicionales y no es más que un pan relleno de alimentos como carnes frías o chorizo.
Su nombre se debe a que parece un palo de madera y le agregaron el relleno por los alimentos que contienen.
El origen del leño relleno
El origen del leño relleno se remonta a la época porfiriana, cuando panaderos franceses trajeron a Guanajuato el Brioche que es un pan relleno de diversos guisos.
Los habitantes de la ciudad rápidamente se apropiaron de la comida y lo adecuaron a la cultura local.
Ahora, no es raro ver diferentes puestos ofrecer a los turistas esta comida y con letreros anuncian que ahí venden los ‘leños rellenos’.
Polémica por la paternidad del leño
El pan francés es popular en la capital, pero hay una familia que mencionó que ellos fueron los creadores de este platillo callejero.
Los Hernández mencionan que los primeros leños rellenos los vendieron hace 30 años y por eso bautizaron a Ramón Hernández Salazar como ‘Don Leño Relleno’.
Destacó que su mamá vendía este pan sin rellenar y su forma alargada llamó la atención de las personas y comenzaron a consumirlo.
Más tarde, se contrató a un panadero conocido de la familia y fue cuando a Ramón se le ocurrió rellenar el bolillo con guisos como jamón con piña, chorizo o salchicha.
Dicen que el secreto está en la elaboración del pan y por eso hay competencia que simplemente cerró por no mezclar los ingredientes de forma correcta.
Podemos considerar al ‘leño’ relleno como la herencia francesa en la gastronomía de Guanajuato. (Con información de Mexico Gastronomía)
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